He tenido el gusto de poder conocer a esos grandes soñadores que siguen pensando en que el mundo es un abanico de felicidad y de paz, a ti, Fátima.
He tenido el placer de ver esos ojos como un rocío de luz, para ti, Rocío.
He conocido la verdad de la pureza y la viveza, a ti Sara.
He conocido a mi gran aura latinoamericana, mi segunda hermana, Chayo 66.
He conocido a mi antillana, gracias por conocerte, gran reina, Maria Elena.
He conocido a una gran fotógrafa y ferrocarril. La única afortunada que ve los amaneceres.
He vuelto a buscar a Eva, luz de poesía y de pasión. Amor sin fín y sin pedir, sólo dar. Gracias a todas las Evas que me he encontrado, no en este camino nada más, sino todo el camino que todavía me queda por descubrir.
Gracias Julito, Papó. Por enseñaerme a buscarme más y a no encontrarme todavía.
Gracias a todos por su tiempo y su apoyo. Si se me queda alguien es como Barcelona, que siempre la llevaré conmigo.
Gracias mi Yemayá, gracias mi Eleguá. Aché pa' todos.



¿Cómo no voy a tener el gusto de hablar de este gran hombre que es Jorge Dallé Hay? Lo primero de esta entrevista era darle las gracias a toda la gente de su viaje, Buscando a Eva.
La primera pregunta que le hice fue:
-¿A qué vino a Barcelona?
sólo me respondió que tenía a su Eva secuestrada dentro de su misma cabeza y que pensaba que tenerla amarrada para él le hacía feliz. Tuvo que dar un giro de 360 grados en todos sus aspectos, en todas sus ilusiones, para darse cuenta de que su ilusión está en el lujo de su placer. Sólo su placer es la felicidad de sus sueños. Disfrutar amigos y muchas Evas de las pocas pinturas que podemos poner en este blog, que ya con su nombre, lo dice todo.
Gracias a ti, gran amigo, que en estos pocos días puedo decir que no se va un amigo a Madrid sino dentro de mi se queda la ilusión y más que todo tu amistad.

Joan Carles de Sarrià.